¡Buenos días! Espero que tengas linda semana… la reflexión de hoy es sobre cómo a veces esperamos que el otro nos salve, o esperamos salvar al otro. Hay una frase que una jefa muy querida por mi me repetía constantemente cuando veíamos que había personas que no avanzaban.. Me decía: No se puede hacer en ti, sin ti. Y es verdad! No puedo obligar a nadie al cambio. Por mucha ayuda o facilidades que te ponga.. No se puede hacer en ti sin ti.. De la misma manera NO SE PUEDE HACER EN MI SIN MI … a veces pretendemos que las cosas cambien, que las cosas funcionen, o sean de determinada manera, pero sin contar con nosotros mismos. Sin darnos cuenta que nosotros somos el verdadero motor de cada cambio. Puedo tener la mejor de las ayudas, los mejores recursos… pero sin mi, nada es posible…. ¿somos conscientes de que en último término lo que me sucede, o como me tomo lo que me sucede, depende única y exclusivamente de mi?
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